La masturbación como autocuidado

Este post es una invitación a experimentar, a probar, a descubrir. Porque no hay una única forma de masturbarse, pero sí muchas más de las que quizá te enseñaron. Y si nunca has probado técnicas diferentes o sientes que podrías disfrutar más pero no sabes por dónde empezar, sigue leyendo. Aquí tienes una guía amena, clara y con recomendaciones de juguetes que te ayudarán a hacerlo a tu ritmo y con mucho mimo.

• Masturbarse (bien) también es autocuidado: técnicas y juguetes para conocerte más y mejor
• › 1. Cambia el chip: masturbarse no es un “plan B”
• › 2. Explora más allá de lo habitual
• › 3. Técnicas para clítoris, vulva y vagina (con y sin juguetes)
• › 4. Técnicas para pene y testículos (y cómo sumarle intensidad)
• › 5. El entorno también importa: cuida el ambiente
• › 6. Jugar con la mente también es masturbarse
• › 7. Elige el juguete adecuado (o déjate asesorar)
• En resumen…
• No te pierdas:
• ¿Necesitas ayuda?

Masturbarse (bien) también es autocuidado: técnicas y juguetes para conocerte más y mejor

Hablar de masturbación ya no es (o no debería ser) tabú. Mucho menos cuando entendemos que explorar el placer propio es una de las formas más sanas, naturales y empoderadoras de conectar con nuestro cuerpo. Lejos de los mitos o los silencios que históricamente han envuelto a la autoexploración, hoy sabemos que masturbarse no solo es placentero, también es saludable. Y como todo lo que se hace con intención y autoconocimiento, mejora con práctica, información y, claro, ¡curiosidad!

1. Cambia el chip: masturbarse no es un “plan B”

Masturbarte no es solo “lo que haces cuando no tienes sexo con otra persona”. Es una experiencia en sí misma: para relajarte, dormir mejor, reducir el estrés, aliviar dolores menstruales o conectar con tu cuerpo sin presiones externas.

Y sí: conocerte más a fondo también mejora tu comunicación y disfrute en pareja. ¡Masturbarte puede ser parte del camino hacia una sexualidad más libre, informada y placentera!

2. Explora más allá de lo habitual

Tanto si tienes vulva como pene, no te limites a “lo de siempre”. Hay muchas zonas erógenas que puedes descubrir: el abdomen, los muslos, los pezones, el perineo, incluso el cuero cabelludo.

Apóyate en un lubricante con base de agua como el Lubricante neutro Naturfluid de Nuei, ideal para caricias suaves y prolongadas, especialmente si quieres experimentar sin fricción.

3. Técnicas para clítoris, vulva y vagina (con y sin juguetes)

Muchas personas con vulva alcanzan el orgasmo con estimulación externa, pero eso no significa que tengas que limitarte al clítoris. Aquí te proponemos técnicas para jugar con diferentes sensaciones:

• Presión estática: sin frotar, solo apoyar la mano, los dedos o incluso un cojín entre las piernas.
• Masajes circulares: con uno o dos dedos, o con vibradores precisos como el Laya II de Fun Factory, perfecto para masajear el clítoris y otras zonas sensibles.
• Estimulación dual: si ya has probado la estimulación interna, puedes explorar el Punto G con tus dedos o con un juguete curvo como el Double Joy de Satisfyer, especialmente diseñado para alcanzar esa zona con delicadeza.
• Succión sin contacto directo: si buscas un orgasmo más profundo sin fricción, prueba un estimulador como el Clio de Getlov, ideal si tienes mucha sensibilidad.

4. Técnicas para pene y testículos (y cómo sumarle intensidad)

Aunque el movimiento rítmico de arriba abajo es el más común, hay muchas más formas de disfrutar y variar:

• Explora ritmos lentos con la mano o con un masturbador de textura interna como el Tenga Egg, discreto y muy recomendable si buscas nuevas sensaciones con lubricante.
• Atención al glande: presión suave, círculos o incluso caricias con un vibrador tipo bala como la Bala vibradora Rocket de Adrien Lastic pueden sorprenderte.
• Masaje perineal o prostático: puedes usar los dedos o juguetes como el Brett de Tarde-Noche, ideal para personas que quieren probar la estimulación anal de forma segura, progresiva y placentera.
• Anillos vibradores como el Royal de Satisfyer pueden ayudarte a mantener la erección y añadir placer compartido si lo usas en pareja.

5. El entorno también importa: cuida el ambiente

Crear una atmósfera que favorezca la relajación y la conexión es clave. No necesitas un spa: basta con cerrar la puerta, poner una música suave o una playlist erótica, usar iluminación cálida o incluso encender una vela.

Si te gustan los aromas sensuales, te recomendamos la vela de masaje con aroma de fresa con miel de Bijoux Indiscrets, que se convierte en aceite tibio para usar sobre la piel.

6. Jugar con la mente también es masturbarse

El erotismo empieza en el cerebro. Muchas veces, cambiar el foco de “tocar para llegar” a “sentir para explorar” es lo que marca la diferencia.

• Fantasear, leer relatos eróticos o usar afirmaciones positivas como “me gusta sentir placer” o “este cuerpo merece ser disfrutado” pueden ayudarte a cambiar la narrativa interna.
• Y si quieres estimular tu imaginación, prueba los dados eróticos de Secret Play, que te proponen acciones divertidas para salir de la rutina.

7. Elige el juguete adecuado (o déjate asesorar)

No todos los juguetes son para todo el mundo. Si nunca has usado uno, empieza por modelos versátiles, silenciosos y con intensidades suaves. Por ejemplo:

• G-Spot Flex de Satisfyer: ideal para personas con vulva que quieren un primer contacto con la vibración con un juguete que se adaptará a tu cuerpo.
• Cassian de JamyJob: perfecto para pene, con vibración envolvente sin necesidad de movimiento.

Recuerda: en Destino Kink, puedes consultarnos cualquier duda. Todas las recomendaciones están hechas por nuestra Sexóloga que saben cómo guiarte, sin juicio y con profesionalidad.

En resumen…

Masturbarse es una forma preciosa de conocer tu cuerpo, darte placer, cuidar tu salud y reconectar con tus deseos. No necesitas ser “experta o experto”, solo tener ganas de probar y darte permiso para disfrutar.

Usa las técnicas que te gusten, prueba juguetes si te apetece y, sobre todo: escucha a tu cuerpo sin exigencias.

Para disfrutar, ¡elige tu Destino!

No te pierdas:

• Guía: Cómo elegir mi primer vibrador?

¿Necesitas ayuda?

Si estás buscando el juguete ideal para empezar (o para seguir explorando), en Destino Kink tenemos opciones para todos los niveles, cuerpos y momentos. Escríbenos y te ayudamos a encontrar el tuyo.

María Ramos Escamilla

Psicóloga, Sexóloga y Directora de Destino Kink

Si necesitas ayuda, escríbeme a: consultas@destinokink.com